Munari como pretexto: una propuesta del alumnado de Educación UVa para la sala de exposiciones del Espacio Joven Sur

‏MUNARI como pretexto

‏La obra de Bruno Munari (Milán, 1907-1998) se despliega sobre buena parte del siglo XX, acercándose en su producción tanto a las vanguardias más tardías (futurismo, arte concreto, arte programado y cinético) como al mundo del diseño gráfico e industrial, la arquitectura, la poesía, la escritura o la cinematografía. Pero además de planteamientos artísticos novedosos y acertadas reflexiones estéticas, entre los límites difusos de su trabajo se vierte una mirada atenta sobre el mundo infantil.

‏De haber puesto en marcha en nuestros días sus laboratorios creativos para niños, no habría duda en situar sus eficaces propuestas dentro de las más inteligentes y hermosas de lo que hoy llamamos innovación educativa. La seducción que el trabajo de Munari ejerce sobre los maestros sigue resultando tan arrebatadora, hay tanta verdad y tino en sus planteamientos, que una mera exploración superficial de sus acciones se convertirá con facilidad en el germen de propuestas didácticas novedosas.

‏En este contexto, la necesidad de construir un proyecto educativo para la asignatura Fundamentos de la Educación Plástica y Visual, correspondiente al segundo curso del Grado en Educación Primaria de la Facultad de Educación y Trabajo Social (Universidad de Valladolid), inspiró, primero, una indagación en la faceta pedagógica de Munari y, luego, la localización de aquellas producciones artísticas suyas capaces de traducirse en propuestas de taller, hábiles para favorecer el desarrollo de la programación.

‏Las piezas que pueden verse en esta exposición son el fruto de las reflexiones sobre la educación artística que han realizado las estudiantes, partiendo de las obras de Bruno Munari. La valentía, como las dudas, han guiado las decisiones estéticas de un grupo que afrontaba el reto de caminar plásticamente por territorios que tenían olvidados, cuando no inexplorados o ignotos. En ocasiones, es el tipo de producción y sus características las que condicionan el resultado; otras veces media un trabajo de conceptualización profundo que avanza sobre una idea metaforizada.

‏Lo sorprendente es que Munari palpita en todas ellas, acelerado, como el corazón de un niño.